Claves para proteger a las empresas ante las ciberamenazas crecientes

Knowmad mood destaca cuatro estrategias para reforzar la seguridad digital corporativa

Foto: cortesía. Portal ERP España.

La transformación digital ha traído consigo grandes oportunidades, pero también desafíos en materia de seguridad. La creciente sofisticación de las amenazas cibernéticas obliga a las empresas a adoptar medidas avanzadas para proteger sus activos digitales e información confidencial. Knowmad mood, consultora tecnológica especializada en transformación digital, destaca cuatro claves fundamentales para reforzar la ciberseguridad corporativa en esta nueva era:

1. Inteligencia Artificial para detectar amenazas antes de que ocurran
   La inteligencia artificial (IA) se ha convertido en una aliada clave en la lucha contra los ciberataques. Su capacidad para analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real permite identificar patrones sospechosos y anticiparse a posibles incidentes. Algoritmos de aprendizaje automático detectan intentos de acceso no autorizado y presencia de malware, activando respuestas automáticas para mitigar riesgos antes de que afecten a la organización.
   
   
2. Blockchain: mayor integridad y transparencia en los datos
   La tecnología blockchain proporciona una capa adicional de seguridad gracias a su estructura descentralizada e inmutable. Al distribuir la información entre múltiples nodos y utilizar hashes criptográficos, se dificulta cualquier intento de manipulación o acceso no autorizado. Además, su trazabilidad permite registrar cualquier modificación en los datos, fortaleciendo la confianza en los procesos digitales.
   
   
3. Formación y cultura organizacional en ciberseguridad
   Más allá de la tecnología, el factor humano sigue siendo clave en la seguridad empresarial. Según el informe Threat Report de ESET de 2024, España ocupa el tercer lugar mundial en detecciones de ciberamenazas, con el phishing como principal vector de ataque. Además, el ransomware sigue siendo una preocupación creciente, situando al país en el octavo puesto en detecciones globales. Knowmad mood destaca la importancia de formar continuamente a los empleados, establecer políticas de seguridad claras y realizar simulacros para mejorar la respuesta ante posibles incidentes.
   
   
4. Cumplimiento normativo y estrategias adaptativas
   El marco regulador en protección de datos es cada vez más exigente. Cumplir con normativas como el RGPD no solo evita sanciones, sino que también refuerza la confianza de clientes y socios. Además, las empresas deben adaptarse a las nuevas regulaciones como NIS2 y DORA, que exigen un análisis riguroso de riesgos y planes de respuesta ante incidentes. A esto se suma la reciente AI Act, que regula el uso de inteligencia artificial en Europa con estándares más estrictos que en otras regiones.

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Riesgos cibernéticos: una amenaza en evolución

El incremento de los ataques cibernéticos en los últimos años ha puesto en evidencia la falta de análisis de riesgos en muchas organizaciones. Contar con sistemas capaces de actuar antes, durante y después de un incidente no solo reduce el impacto de los ataques, sino que también mejora la confianza del mercado y los clientes.

“La ciberseguridad no es solo tecnología, no es un producto, es un proceso en constante evolución necesario para garantizar los activos de cualquier empresa u organismo. En un entorno donde las amenazas son cada vez más sofisticadas y persistentes, no basta con adoptar herramientas avanzadas; es fundamental desarrollar una estrategia global que incluya prevención, detección y respuesta rápida ante incidentes. La combinación de inteligencia artificial, blockchain y una cultura organizacional orientada a la seguridad nos permite anticiparnos a los riesgos y minimizar su impacto”, afirman desde Knowmad mood.

La ciberseguridad debe abordarse desde un enfoque integral que combine tecnología avanzada, formación y cumplimiento normativo. No se trata solo de prevenir ataques, sino de garantizar que, cuando ocurran, la respuesta sea rápida y eficaz para minimizar sus efectos y asegurar la continuidad del negocio.