¿Transaccionar o colaborar?
Publicado por Elena Santos, Purchasing & Alliance Manager en Aitana en 12/12/2025 en Artículo«Es el momento de dejar atrás el modelo tradicional y dar paso a algo más transformador: una relación donde empresa y proveedor se convierten en socios estratégicos»

Elena Santos, Purchasing & Alliance Manager en Aitana. Foto: cedida. Portal ERP España.
Durante años, las empresas han tratado a sus proveedores como meros suministradores. El objetivo era simple: conseguir el precio más bajo y cerrar la transacción lo más rápido posible. Pero, si somos honestos, ese enfoque ya no da los resultados que necesitamos. Ahora la competencia es feroz, la innovación es crucial, y las reglas del juego han cambiado. Es el momento de dejar atrás el modelo tradicional y dar paso a algo más transformador: una relación donde empresa y proveedor se convierten en socios estratégicos, trabajando codo con codo para crear valor y adaptarse a los retos del futuro.
Henry Ford ya resumía esta idea con una reflexión que sigue totalmente vigente: “Llegar juntos es el principio. Mantenerse juntos es el progreso. Trabajar juntos es el éxito”.
De hecho, cuando las empresas y los proveedores se ven como socios, las oportunidades de innovación se multiplican. Ya no se trata solo de vender un producto, sino de crear soluciones conjuntas que beneficien a ambas partes. Esta colaboración no solo mejora la eficiencia, sino que también abre las puertas a la innovación compartida. Conocer mejor al otro y trabajar hacia objetivos comunes permite desarrollar productos y servicios que realmente se adaptan a lo que pide el mercado, y, lo mejor de todo, más competitivos.
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La resiliencia es clave en estas relaciones colaborativas. Si algo nos han enseñado las crisis, los desastres naturales o las interrupciones económicas que hemos sufrido estos últimos años, es que las empresas que tienen una relación cercana con sus proveedores pueden adaptarse mucho más rápido y con menos fricción. No solo es más fácil gestionar los imprevistos, sino que también fortalece una lealtad mutua y un compromiso a largo plazo, porque ambos están alineados en el mismo propósito: mejorar continuamente y lograr un éxito compartido.
Ahora bien, no todo es tan sencillo. El cambio hacia una relación más colaborativa tiene sus desafíos. La comunicación clara es esencial para alinear expectativas desde el principio. Muchos temen perder control sobre la calidad o los costes si empiezan a compartir más información o a adoptar una relación más abierta. Pero, sinceramente las relaciones colaborativas no son una amenaza, sino una oportunidad para ambos.
Y es que la verdadera innovación y el crecimiento sostenido surgen cuando las relaciones van más allá de una simple transacción. No se trata solo de intercambiar productos o servicios, sino de crear valor compartido en todos los sentidos: desde el conocimiento y la creatividad hasta las soluciones conjuntas. Al poner la colaboración en el centro, las empresas no solo se aseguran una ventaja competitiva, sino que se convierten en líderes del cambio.
Es hora de dejar atrás las negociaciones centradas únicamente en el precio y empezar a construir relaciones basadas en innovación, confianza y un crecimiento mutuo que beneficie a ambas partes. Este es el futuro de las relaciones con proveedores: más allá de contratos y términos, lo que necesitamos es una alianza estratégica que nos lleve al éxito.






